[Só existe versión en castelán deste informe]
La internacionalización es uno de los grandes desafíos de la educación superior en España. Quizá el mayor, diría yo, junto a la formación continua, si lo que se valora es la oportunidad que representan. Y al respecto hay consenso. El propio secretario general de universidades, José Manuel Pingarrón, afirmaba recientemente que la internacionalización está entre los cuatro retos inmediatos de la universidad española (junto a la financiación, la carrera académica del PDI, y la formación permanente). Por eso parece conveniente traer aquí la síntesis del estudio que se les ha enviado para esta sesión, en el que ha participado la CCS y que contiene 24 propuestas para reforzar la presencia de las universidades en el escenario internacional. Léanlo si es una de las temáticas en las que tienen interés, es un muy completo análisis, y saquen sus propias conclusiones, por ejemplo en cómo se puede aprovechar el alumni, la necesidad de flexibilizar el marco legal o la conveniencia de reforzar la obligatoriedad del idioma extranjero.
La CCS enfoca sus esfuerzos en esa dirección, como digo, y lo hace también en priorizar la negociación a nivel autonómico de los aspectos que la LOSU delega en ese ámbito. Para ello se está elaborando un documento que sirva de referencia. El objetivo es disponer de propuestas concretas para el legislador autonómico sobre competencias, composición, mecanismos de funcionamiento, organización de apoyo y recursos de los CS para el desempeño de nuestro cometido.
Y en este contexto, un último apunte para señalar el posicionamiento público de la CCS en contra del Estatuto del becario, calificando como grave que “una actividad académica con finalidad formativa sea tratada desde una óptica puramente laboral por desarrollarse en centros de trabajo”, y advirtiendo como error de partida que los becarios, pese a estar protegidos por el seguro escolar, tengan que ser incluidos en el sistema de la SS por empresas, instituciones y entidades del tercer sector con las que no mantienen relación laboral alguna.
También se les ha enviado como documentación de este punto dos una recopilación de la normativa que recoge y agrupa las competencias y atribuciones del CS en el ámbito económico, así como u calendario estimativo para su aplicación. Agradezco a la Comisión Económica y a su presidente que hayan elaborado este documento de referencia, porque nos proporciona un marco claro y efectivo para que las relaciones entre CS y equipo de gobierno en este campo sean más productivas, más fluidas y más leales, persiguiendo en todo momento el objetivo de ser más útiles y más rigurosos, lejos de los afanes fiscalizadores sin más.
En lo que concierne a la UVigo quiero destacar dos datos: de una parte, que haya duplicado sus ingresos por I+D, respecto a 2022, que ya había sido un año récord, impulsada por los fondos europeos y gracias a la actividad de sus grupos de investigación. Y de otra parte, que el prestigioso Ranking de Times Higher Educación sobre el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible la situe como la octava del mundo por su contribución al aprendizaje durante toda la vida, su investigación en el campo de la pedagogía y su compromiso con la educación inclusiva. Enhorabuena.
En cuanto al Orden del día de hoy, los temas económicos, con una buena liquidación de cuentas y algunas leves dudas sobre ingresos pendientes de imputar, la morosidad y el problema con el inventario, que vuelve a reflejarse en el informe auditor. En ello profundizará el presidente de la Comisión Económica, -al que aprovecho para agradecer su excelente trabajo al igual que a sus miembros-.
También agradezco la presencia del vicerrector Alfonso Lago, para explicarnos el horizonte 2024-2025 en la oferta de titulaciones de la Uvigo. Asunto capital para valorar los objetivos formativos y la cartografía de la institución.
Y del mismo modo a los profesores Andrés Mazaira e Isabel Diéguez, que han trabajado a fondo estos últimos meses para explicarnos hoy con datos por qué la universidad es más importante, más transcendente, más rentable y más necesaria de lo que generalmente pensamos. A falta de la confianza y el afecto que la universidad necesita, confío en que los argumentos, las razones y las evidencias de las cifras ayuden e invertir la situación. Creo que estas conclusiones debiéramos hacerlas públicas por su alto valor y por lo que reportarán a poder crear conciencia social sobre la relevancia de la educación superior, más allá de las insustituibles prestaciones en la docencia, la investigación, la innovación o la transferencia.
Aún en aras de abreviar en lo posible mi intervención en este exigente pleno, resulta obligado terminar felicitando a Elena Rivo por su nombramiento como Conselleira de Promoción do Emprego e Igualdade. Elena era vicerreitora del Campus de Ourense, y fue miembro de este Consello Social en 2005.
Y felicitaciones igualmente para Ana Ortiz, nueva delegada de la Xunta en Vigo, -que pertenece a este Consello Social desde hace justamente dos años, y que hoy está presente en este pleno- y a los concejales electos Gerardo Pérez Puga y Silvia Crespo, en Pontevedra; y Armando Ojea, en Ourense.